El desmantelamiento de una industria, sea de la índole que fuera, puede tener diversas motivaciones; desde el fin de su vida útil, hasta, por desgracia en estos últimos años de crisis, que el negocio no ha ido todo lo bien que se hubiera deseado. Normalmente, muchos de los equipos, instalaciones y, en general, activos que formaban la industria se encuentran en un estado tal que les confiere la capacidad de reutilizarse con el mismo fin en otra ubicación diferente. Por ello, la premisa fundamental en el desmantelamiento de una instalación debe enfocarse en recuperar ciertos activos que por su naturaleza y estado tienen un importante valor.

Algunas de las claves del éxito económico en un desmontaje, desmantelamiento o desguace industrial, según la experiencia que hemos adquirido en Surus Inversa con estos años de trabajos en diferentes instalaciones, pueden ser las que comentamos a continuación:

ANTES DE; PIENSA SI ES TOTALMENTE NECESARIO…

1ª. Es muy importante, antes de pensar en un desmantelamiento industrial, contemplar la posibilidad de que la unidad productiva, sea cual sea, pueda volver a ser utilizada por otro operador; siendo el mismo destino el que se le aplique a la instalación; independientemente de si se trata de una instalación energética, de fabricación de productos o de prestación de servicios. El hecho de que esa industria haya dejado de ser rentable económicamente a un operador, no quiere decir que otro pueda sacarle rendimiento.

2º. En caso de que la clave nº 1 planteada no sea factible, se pueden buscar alternativas para utilizar esa instalación con sus activos para otra actividad diferentes que sí pueda resultar óptima para el bolsillo de quien la dé vida. Por ejemplo, una antigua instalación de almacenamiento y distribución de combustibles puede resultar muy interesante para un recuperar o gestor de residuos.

DESMANTELAMIENTO SÍ; PERO CON TACTO

¿La única solución es el desmantelamiento…?

1º. En caso de que las dos primeras posibilidades no tuvieran efecto positivo se debe empezar a pensar en un desmantelamiento de la instalación. La premisa que debe ser capital en esta fase es conocer a la perfección los activos que forman parte de las instalaciones, sabiendo el uso que se les ha dado anteriormente. Por ello es fundamental tener toda la documentación disponible acerca de los equipos e instalaciones que forman parte de la industria. Al potencial interesado en la adquisición de los equipos precisamente se le despierta el interés cuando un activo le resulta atractivo y para ello se le debe aportar toda la información que sea posible.

2º. La “regla de las 3R” que tanto se utiliza en el ámbito medioambiental también tiene una repercusión importante en el asunto económico. Siempre será mejor reducir la generación de residuos mediante la reutilización de los equipos. Se debe intentar que la generación de residuos que requieren un tratamiento como tal sea mínima. Aquí también interviene un concepto que hoy en día está en boca de todos y es la Economía Circular. La búsqueda de reutilización frente a la gestión de residuos debe estar grabada a fuego en todo desmantelamiento industrial.

Un ejemplo muy claro para esta clave sería un transformador eléctrico. El hecho de reutilizar un transformador eléctrico en otra ubicación y para el mismo fin para el que fue fabricado supone que además de que no fuera necesario reciclar los metales de los que está compuesto, tampoco sería necesario gestionar los aceites y lubricantes que lo componen, siendo éstos residuos peligrosos.

Seguramente haya muchas otras claves que otorgan el éxito económico de un desmantelamiento industrial. De ahí que el título de esta entrada sea Algunas claves del éxito…