La empresa Surus Inversa ha puesto a la venta los enseres del Almacén de la Villa del Ayuntamiento de Madrid a través de Escrapalia, su portal online de subastas. En este almacén municipal se depositan muebles y objetos que, como consecuencia de desahucios o de derribos forzosos, hundimientos, incendios o cualquier otra causa, ocupan la vía pública, algo que va en contra de las ordenanzas municipales. Surus Inversa está gestionando miles de objetos de los madrileños a través de una licitación del Ayuntamiento de Madrid y los subasta en Escrapalia, el portal de subastas industriales de referencia en España por volumen de transacciones. Todos los enseres que ha lanzado a subasta Surus Inversa están llenos de recuerdos y de historias de Madrid y sus habitantes. Estas semanas están subastando armarios, descalzadoras, bargueños, cómodas, mesas, espejos, libros, joyas, vinilos y todo tipo de antigüedades.
Los informativos de TVE lo reflejaron  muy bien en esta noticia, que también contó con un amplio artículo en el diario El País, con el sugerente titular: “La vida de los madrileños sale a subasta”.

Una vez que los objetos se subasten en el portal Escrapalia, Surus Inversa, como empresa adjudicataria de la licitación del Ayuntamiento de Madrid, se responsabiliza de la retirada y transporte de los objetos del Almacén de la Villa.
Una de las ventajas de que el adjudicatario sea especialista en logística inversa y utilice plataformas digitales para la venta, es que los objetos se pueden vender sin sacarlos del Almacén de la Villa. Esto evita costes de almacenamiento, transporte, embalaje industrial a la vez que se evitan emisiones de dióxido de carbono producidas por los transportes. Surus Inversa localiza los canales de venta más adecuados para los excesos de inventarios y stocks obsoletos, devoluciones, equipamiento inutilizado, plantas o instalaciones en desuso y residuos.
La logística inversa encaja en el nuevo concepto de economía circular que se está impulsando desde la Unión Europea y que cuenta con un paquete de medidas concretas que lanzó la Comisión Europea el pasado mes de diciembre. Supone un cambio de paradigma porque acaba con el principio de usar y tirar. El ciclo de vida de los productos se extiende gracias a la reutilización y al reciclaje de viejos productos. Y su vida útil también se alarga por una mejor gestión del tratamiento de los residuos. Bajo el paraguas de la economía circular, todos los bienes son gestionables y proporcionan a las organizaciones un retorno económico, social y medioambiental.